Derbi Descafeinado Real Canoe NC-CNCA, 4a jornada 1D liga nacional

Derbi descafeinado

 

Era ésta la “crónica de una ‘‘derrota’’ anunciada”. Propios y extraños convendrían que Canoe era más que claro favorito en un clásico cada vez más descafeinado con el paso de los años. 

 

Hasta ahora, Alcorcón, fiel a su carácter rebelde, no solo vendía cara la derrota, sino que llegó a ser durante un tiempo una bestia negra en varias categorías, y que tuvo su punto culminante en la añorada final por el ascenso a Primera Nacional en esta misma piscina del Pez Volador. A punto estuvo aquella victoria de tumbar el ambicioso proyecto del Canoe, pero una serie de renuncias de equipos les permitió finalmente subir y desde entonces crecer exponencialmente, hasta el punto de llegar en la actualidad a ser un equipo más propio de División de Honor. 

 

Con tres fichajes de primer nivel, Carmen Baringo, Elia Montoya y Carmen Jiménez, con una reciente campeona mundial junior en la recámara como Lucía Gómez, la plantilla del Canoe es sin duda la más fuerte de la categoría. Por contra, CNCA ha visto cómo casi la mitad de las jugadoras (6) que lograron el ansiado ascenso han sido baja, ya fuera por fichar por otros equipos, como por retirarse de la práctica del waterpolo. Y las chicas que se van incorporando tienen que conocerse y aclimatarse a su nuevo club. Para eso se necesita un tiempo, del que a veces no se dispone, y este partido es un ejemplo.

 

Se buscaba ofrecer una buena imagen y no dejarse llevar por el favoritismo de nuestras rivales, y en un primer cuarto atractivo, CNCA

sorprendía con su intensidad al Canoe. De hecho fue quien abrió fuego, en unos primeros minutos de alto acierto ofensivo. Al final del parcial, la igualdad en el tanteo (3-2) y el juego ofrecido evocaba a otros clásicos añorados. 

 

Pero lo que también es un ‘clásico’ es la frustrante arbitrariedad en la interpretación de algunas jugadas que marcaron el devenir del segundo y tercer cuarto y que facilitaron que Canoe definitivamente se escapara en el marcador. Si bien ambas aficiones se quejaban por la parte que les tocaba, a la de Alcorcón le tocó quejarse con más frecuencia.

 

Sendos 4-1 en ambos parciales ampliaron una mínima diferencia a un contundente 11-4. Pero a pesar de lo que señalaba el marcador, no se podía poner objeción alguna al esfuerzo de nuestro absoluto femenino, que seguía intentando de manera infructuosa superar la presión de las anfitrionas.

 

Aún conscientes de que la derrota ya era inevitable, Alcorcón no se dejó ir y siguió con su hoja de ruta ante un rival que buscaba con afán ampliar la renta lo máximo posible. El parcial de 5-3 dejaba el resultado final en 16-7, excesivo para los méritos de unas y otras. 

 

Y es que repasando de nuevo el partido, y viendo que varios goles fueron de último segundo (algunos desde su piscina y más que dudosos), que no tuvimos oportunidad de lanzar ningún penalti de todos los reclamados, como sí tuvo su oponente, y que no se transformó ninguna de las superioridades, frente al 30% de efectividad del Canoe, se puede traducir que todos los condicionantes fueron desfavorables y que, a pesar de las bajas, ausencias, retiradas y demás contingencias, la diferencia no es tan grande como cabía suponer. Esto refuerza la idea de que vamos por buen camino, que el trabajo empieza a dar sus frutos y que pronto se podrán recoger. 

 

Ahora toca esperar una jornada de descanso, antes de afrontar el decisivo fin de semana, donde se decidirán gran parte de las opciones de clasificarse entre las 8 mejores. Dos Hermanas, primero, y Waterpolo Marbella después, vendrán el mismo fin de semana a Santo Domingo con la misma intención. Esa sí es nuestra liga.